Con el objetivo de hacer el examen más justo y equilibrado posible de una de las figuras más emblemáticas del siglo XX en Colombia, el autor es consciente de que no se lo puede comprender sin asomarse al fondo de su siglo. Álvaro Gómez Hurtado fue determinado por el ambiente político en el que nació y creció, por la virulencia de los odios que enemistaron a sus correligionarios y a los políticos liberales y por la imponente figura de su padre, el máximo líder conservador de la primera mitad del siglo XX y uno de los hombres más satanizados y peor comprendidos de la historia patria.

De modo que esta biografía es, primero, la radiografía de todo un siglo, una mirada atenta de los hechos y personajes más sobresalientes del siglo XX en Colombia, un examen agudo del declive de la clase política del país, y en contraste con todo esto es posible comprender, redescubrir, reivindicar, la figura del político excepcional que fue asesinado en noviembre de 1995.